lunes, 8 de noviembre de 2010

beneficios de la leche materna


La leche materna es una sustancia viva, contiene tantas células como la propia sangre. En algunas sabias culturas milenarias como en la India se la denomina "sangre blanca". Estas células pueden destruir activamente parásitos, bacterias y hongos y contribuyen a regular la respuesta inmunológica, los gérmenes se multiplican menos y con menos rapidez en la leche materna, la leche materna no solo es un buen alimento, es además una buena medicina.

¿que es la lactancia materna?

 es la alimentación con leche de madre. La OMS y el UNICEF señalan desarrollo correcto de los niños. La OMS (Organización Mundial de la Salud) y el UNICEF (Fondo de Naciones Unidas para la Infancia) recomiendan como imprescindible la lactancia materna exclusiva durante los seis primeros meses del recién nacido. También recomiendan seguir amamantando a partir de los seis meses, al mismo tiempo que se va ofreciendo al bebé otros alimentos complementarios, hasta un mínimo de dos años. La Academia Americana de Pediatría recomienda mantener la lactancia al menos durante el primer año. El Comité de Lactancia de la Asociación Española de Pediatría coincide en sus recomendaciones con OMS y UNICEF.
Según la OMS y el UNICEF, a partir de los dos primeros años la lactancia materna debería mantenerse hasta que el niño o la madre decidan, sin que exista ningún límite de tiempo. No se sabe cual es la duración "normal" de la lactancia materna en la especie humana. En nuestra cultura se tiende a considerar la lactancia materna como algo propio únicamente de bebés de pocas semanas o meses. Sin embargo, también se han descrito casos en los que se ha mantenido la lactancia durante varios años. Los estudios antropológicos publicados concluyen que la franja natural de lactancia en bebés humanos se encuentra situada entre los dos años y medio y los siete.

jueves, 28 de octubre de 2010

COMO INFLUYE EL ALCOHOL Y EL CIGARRO EN LA LACTANCIA MATERNA

Fumar durante la lactancia no es recomendable. La nicotina, proveniente del cigarrillo, pasa al torrente sanguíneo de la madre y a la leche materna y esto tiene un efecto negativo en la salud del bebé.
Según Camilo Uribe, médico toxicólogo, la nicotina  como la gran mayoría de las sustancias potencialmente tóxicas pasa al bebé, en aproximadamente 1 por ciento de la concentración de la madre, a través de la placenta y la leche materna.
Indirectamente, la madre fumadora disminuye su capacidad de transporte de oxígeno a los órganos y tejidos, provocando hipoxia (baja concentración de oxígeno) lo cual afecta el crecimiento y desarrollo del feto durante el embarazo. En la lactancia se comprobó que puede ocasionar problemas como el aumento anormal de la frecuencia cardiaca del bebé.




Los bebés expuestos a la nicotina presentan comportamientos extremos: unas veces están muy alerta y otras con sueño. Algunos se muestran irritables, lloran inconsolablemente y succionan seguido el seno, pero no lo hacen bien y no comen suficiente. Los bebés que se adormilan también comen menos, tienen bajo peso y no crecen como deberían.
Cuando las madres fuman durante la etapa de la lactancia, sus hijos padecen problemas delicados en sus vías respiratorias, bronquitis, neumonía y asma debido al humo.
El humo es peligroso, afecta el sistema respiratorio del bebé, genera infecciones de oído y complicaciones respiratorias con mayor frecuencia.
A su vez, la nicotina inhibe la hormona prolactina, que estimula la producción de leche y, en consecuencia, reduce la “bajada de la leche.
 
Por eso se aconseja a la madre dejar el cigarrillo durante esta etapa y si no es capaz, disminuir la cantidad, fumar lejos del bebé , y hacerlo mínimo dos horas antes de amamantar.
En cuanto a la ingesta de bebidas alcohólicas, es importante recordar que el alcohol es  teratogénico, es decir, capaz de producir malformaciones en el feto durante el embarazo.
Un 1 por ciento de la concentración del alcohol en la madre pasa a través de la placenta o la leche materna al bebé. Por eso no se recomienda su ingesta en el transcurso de la gestación ni durante la lactancia.
Sin embargo, la madre puede tomar una copa en un evento social, por ejemplo, pero, por lo menos, dos horas antes de amamantar para que su cuerpo la elimine y no pase a la leche.
Es importante que antes de beber, aunque sea en pequeñas cantidades, la madre tenga en cuenta aspectos como su propio estado de salud, pues una madre con bajo peso no elimina el alcohol fácilmente. También el desarrollo del bebé y el peso porque si es bajo será más sensible al alcohol. Un bebé muy pequeño o prematuro está más expuesto a los efectos nocivos del alcohol, ya que su hígado no los procesa adecuadamente.